Historias de San Luis: recordando más kioscos de diarios y revistas
El pasado domingo hice un breve recorrido por unos pocos kioscos de diarios y revistas de San Luis, algunos de los cuales están funcionando, otros se reconvirtieron y varios cerraron.
Hoy vamos a agregar algunos, con la salvedad que siempre van a faltar varios.
Recordamos algunos ya nombrados y agregamos: Roberto Castro en el banco Nación de San Martín y Pringles; Vescia en la esquina del Hipotecario en Junín y Rivadavia; el inolvidable y querido Yoyo en la Plaza Independencia, zona de Tribunales, en 9 de Julio y Rivadavia.
Don Alcaraz en la esquina opuesta al Yoyo en San Martín y 25 de Mayo; el Negrito Rodolfo Blanco en Avenida España y Maipú; el kiosco frente al Correo en la misma vereda de la institución.
El de España y Rivadavia; los de la Vieja Terminal (dónde había más de uno); Sindoni por esa zona, y el de Junín, San Martín e Illia en la vereda del ex Colegio Nacional.
En el Paseo del Padre por calle Colón, estuvo el escaparate de Daniel Sosa y después se transformó en florería. Al lado de este, ahora hay un kiosco de diarios y revistas.
Siempre en el Paseo del Padre, por la calle Rivadavia, encontrábamos a don Oscar Tobares. Toda una institución.
En Aristóbulo del Valle y Sucre recuerdan la existencia de un kiosco de importantes dimensiones, y siguiendo por la zona norte, en Sucre y España, dónde alguna vez funcionó la fábrica Annan de Pergamino, estuvo un hermano de Rodolfo Blanco, también árbitro de fútbol como él llamado Mario.
Siempre por España, estaba Godoy en la esquina con Hipólito Irigoyen.
Raúl Ochoa sigue resistiendo en la calle Pringles frente a la Plaza, y en Belgrano y San Martín atiende Marcos su negocio.
En Pringles y Colón, Amelia recuerda un hermoso puesto, en la vereda donde funcionó por muchos Los Vascos.
Rafael me escribió rememorando al kiosco de Adaro en Lafinur y Roca, donde también se podía jugar a la quiniela.
Y por la avenida Lafinur esquina Balcarce el kiosco Lelé de don Antonio Quiroga en los años 70.
Además, Miguel me cuenta que don Antonio Quiroga era un excelente escritor y recitador.
En la esquina de Rivadavia y Belgrano estaba el kiosco de Higinio. Un personaje. Muy amigo de la gente de la radio LV13 donde comencé a trabajar, que estaba a media cuadra, en Rivadavia 563.
Originalmente ese lugar era de don Fernández y lo heredó luego Higinio Muñoz, que era su yerno.
Sarmiento y Centenario era un hermoso puesto, lo mismo que el de Maipú y Junín, esquina donde hay un negocio actualmente y antes fueron reparticiones nacionales.
También desapareció de la comercialización el local de Lavalle y San Martín.
Un kiosco tradicional es propiedad del “Gringo” Gitto. En realidad, Domingo Gitto. Kiosquero y canillita de diarios y revistas desde hace 45 años.
Estuve conversando con él por varios minutos, mientras atendía clientes, saludaba amigos y anotaba a los interesados en el álbum y las figuritas de la selección, que son furor.
Su kiosco está en la calle Rivadavia en la vereda del ex cine Roma, donde ahora funciona un templo evangelista.
Reconocía que los lectores de diarios y revistas disminuyeron, y su método de asegurarse las ventas es trabajar con pedidos.
Se lamenta que los diarios nacionales vengan únicamente los sábados y domingos, y además por la tarde, lo que dificulta el reparto.
También las revistas de circulación nacional, que aparecen en la semana, llegan a San Luis recién el lunes siguiente. Es un atraso importante.
Tiene un sistema por el cual en su celular están todos los pedidos pendientes, y entonces cuando llega la publicación, él le envía un mensaje al interesado avisándole que llegó lo que estaba esperando.
Me muestra algunos libros que están a precios insospechadamente bajos comparados con las librerías.
Y me asegura que en su casa tiene 12 cajas con ejemplares salteados de muchas colecciones.
En una de esas, si le falta un número de alguna colección, el Gringo puede tenerla. Es una posibilidad.
Hay colecciones de valores importantes. Por ejemplo, una que trae discos de vinilo y que cada ejemplar cuesta 6 mil pesos.
Y las revistas nacionales más conocidas han discontinuado su salida.
Los kioscos de diarios y revistas. La mayoría de los dueños de los que aún funcionan han sido ellos canillitas o sus familiares.
Kioscos de diarios y revistas. Sobrevivientes de la tempestad.